Soy Aurelio de la Cámara y siempre amé la música, siempre me gustó cantar además de escuchar.
Me incorporé a un coro básico pero ameno, pasé a otro un poco más sofisticado y rápidamente
a otro, ya más exigente. Necesitaban voces de tenor. Se hacía una prueba para ingresar, la superé,
aunque el Director me sugirió que me vendría bien tomar clases de canto y técnica vocal.
Seguí su consejo y así llegué hasta PILAR. Busqué profesores vía online y opté por ella entre los
varios que contacté.
Surgió la chispa: su saber, su saber ser, su saber hacer, me han llevado a poder vivir y disfrutar la
música como nunca imaginé.
Mi mente, mi disposición hacia la música, hacia la interpretación han cambiado.
Canto para disfrutar y hacer disfrutar.
He ampliado mi rango de voz. El trabajo con el diafragma, con la vocalización, con la colocación de la
voz, la aplicación de técnicas de relajación…. todo eso me ha proporcionado seguridad y
control a la hora de de cantar.
Los recursos didácticos de Pilar hacen que sus clases sean exigentes, rigurosas, duras… pero
variadas, amenas, divertidas… Su magisterio es empático e inspirador.
Con el paso del tiempo he aprendido que los buenos maestros se apasionan con lo que enseñan…
Pues bien, a Pilar se le ilumina la mirada cuando te habla de la vida que esconde la canción que
estás trabajando y te dice: “ahora olvídate de todo y ¡canta!”
Todo lo antedicho, a lo que añado su generosidad, su simpatía, su sencillez, su integridad personal,
me lleva recomendar a todo aquel que aspire a cantar bien, disfrutar y hacer disfrutar con su música
que contacte con Pilar.
¡no se arrepentirán!